Ablación quirúrgica de fibrilación auricular en pacientes sometidos a reemplazo valvular mitral
Highlights ACC Scientific Sessions 2015
Por SAC Joven
Entre el 30% y el 50% de los pacientes sometidos a reemplazo valvular mitral tienen fibrilación auricular (FA). ¿Debe plantearse sistemáticamente la ablación de la FA en este contexto?
Un estudio presentado en el congreso ACC 2015 adjudicó aleatoriamente 260 pacientes con FA persistente (duración mayor a 7 días) o FA persistente de larga duración (mayor a 1 año) que fueran sometidos a cirugía valvular mitral a recibir o no durante la cirugía tratamiento de ablación con diferentes estrategias.
A todos los pacientes se les realizó cierre de la orejuela izquierda, y en los que ingresaban en el grupo ablación se los randomizó a 2 estrategias de tratamiento: aislamiento simple de las venas pulmonares o un procedimiento de maze en ambas aurículas.
El punto final primario fue mantener el ritmo sinusal durante el seguimiento.
El promedio de edad fue de 70 años, el 46% eran mujeres, la fracción de eyección promedio era 55%, y el 50% de los pacientes estaba en clase funcional III-IV. El 54% presentaba FA de larga duración. Se realizó reemplazo mitral en 41% y plástica mitral en el 59%.
El seguimiento se realizó a 6 y 12 meses; se evaluó mediante ECG Holter de 3 días la ausencia de FA.
Los pacientes asignados al tratamiento de ablación presentaron significativa disminución de la FA durante el seguimiento (63,2% vs29,4%). En cuanto a las complicaciones relacionadas con el procedimiento no se encontraron diferencias significativas por agregar el tratamiento de ablación.
Cuando se compararon las diferentes estrategias de ablación no se encontraron diferencias estadísticamente significativas entre ellas.
No hubo tampoco diferencia significativa en el seguimiento al año en mortalidad (6,8% con ablación vs. 8,7% en el control) ni en eventos cardiovasculares mayores.
Los pacientes que sometidos a ablación presentaron menor percepción de palpitaciones diarias comparados con el grupo que sólo recibió tratamiento quirúrgico mitral.
Aun así, cuando se analizaron ambas estrategias de ablación se encontró un mayor requerimiento de marcapasos definitivo en los pacientes que recibieron tratamiento de ablación: al año 21,5% vs. 8,1% en el control (p=0.01).
En conclusión, el tratamiento de ablación de FA en los pacientes sometidos a cirugía mitral no se asoció con eventos mayores y podría reducir la presencia de FA en el seguimiento. La mayor necesidad de colocación de marcapasos en el seguimiento, sin embargo, obliga a ser cauteloso y a realizar nuevos estudios antes de poder recomendarla como estándar de cuidado.