Actualización COVID-19: Medidas para reducir contagios

La pandemia de SARS-CoV-2 se multiplicó con rapidez y, ante la suma de decenas de miles de casos, los sistemas sanitarios de todos países luchan actualmente para hacer frente a los enfermos con COVID-19 y comorbilidades. La OMS advirtió que, si bien los adultos mayores son los que están en mayor riesgo de morir, también los jóvenes pueden enfermar si no toman precauciones como mantener distancia física y lavarse frecuentemente las manos. Los niños, ahora se sabe, también pueden infectarse con el nuevo coronavirus, aunque suelen padecer una enfermedad menos severa. 

En Italia, donde los fallecidos ya superan los cinco mil, el 38% de los casos confirmados se dio en personas mayores de 70 años. Una cifra similar es la de afectados entre 51 y 70 años, mientras que 24% tiene entre 19 y 50 años, y apenas 1,2% tiene entre 0 y 18 años, según cifras publicadas por JAMA el 17 de marzo pasado.

Entre los cientos de estudios científicos que comenzaron a ver la luz durante la última semana, llamaron la atención los que advirtieron sobre los síntomas gastrointestinales (especialmente, diarrea) como presentación del COVID19 en Wuhan, China, y las observaciones de otorrinolaringólogos sobre la pérdida súbita del sentido del olfato en fases tempranas de la infección. También sobresalieron los trabajos que apuntan a la transmisión por parte de personas asintomáticas o con síntomas muy leves.  

Los médicos, enfermeros y técnicos están en la primera línea de atención y deben aplicar medidas de higiene estrictas y utilizar el equipo protector adecuado, de acuerdo a su operatoria. En Italia, un 10% de los trabajadores de la salud ya se infectaron.  Ante la escasez de máscaras y vestimenta protectora en Estados Unidos, JAMA hizo un llamamiento para aportar ideas y prestigiosos médicos reclamaron un uso responsable de los equipos de protección personal (PPE).

“Aunque hagamos todo bien, si no priorizamos a los trabajadores de salud muchas personas morirán, porque los profesionales que podrían haberles salvado la vida estarán enfermos”, advirtió Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, en conferencia de prensa. “Los trabajadores de la salud sólo podrán hacer su tarea efectivamente si la hacen en forma segura”, insistió el funcionario, quien también advirtió que “la pandemia se está acelerando”. 

Según Tedros, desde el primer caso reportado en el mundo hasta el número 100.000 pasaron 67 días. Pero bastaron 11 días para los segundos cien mil; y apenas 4 días para los terceros cien mil. “No sólo hay que tomar medidas defensivas, como quedarse en casa. También hay que tomar medidas agresivas, como salir a testear cada caso sospechoso”, enfatizó el funcionario de la OMS.

En cuanto a la Sociedad Argentina de Cardiología, “estamos comprometidos desde el comienzo de la epidemia a compartir la información proveniente de sociedades científicas internacionales con nuestros miembros”, dice Alejandro Hershson, presidente electo de la SAC. 

Aislamiento y consultas

En la Argentina, donde ya hay áreas con transmisión comunitaria, la decisión de imponer el aislamiento social preventivo obligatorio de la población cambió el escenario de las ciudades y obligó a replantear estrategias cotidianas. El pedido de no acudir a las guardias hospitalarias salvo estricta necesidad es fundamental pero podría generar algunos trastornos, como los retrasos en la atención de síndromes coronarios agudos. También se pueden presentar algunas dificultades para acceder a la vacuna antigripal, que se está distribuyendo en todo el país. 

“Es importante confirmar que, como siempre, si una persona siente dolor de pecho y tiene factores de riesgo o antecedentes cardíacos, debe acudir inmediatamente a la guardia para descartar un síndrome coronario agudo”, afirma Hershson. “Pero durante la pandemia se recomienda reducir las consultas médicas no urgentes y evitar los estudios de control (Holter, ecocardiograma) no indispensables”.

En cuanto a la vacunación, la SAC recomienda que todos los grupos de riesgo –y especialmente los pacientes cardiovasculares- se vacunen lo antes posible contra la influenza. “Postergar la vacunación podría ser riesgoso, de modo que aconsejamos que los pacientes se vacunen y las instituciones se organicen para hacer llegar las vacunas a la población”, reflexiona Hershson.

El presidente electo de la SAC también aconseja que los pacientes se mantengan activos dentro de sus casas, realizando ejercicios o trabajos, respetando los horarios de descanso y sueño, y tratando de alimentarse en forma saludable. “El estrés y el aislamiento social son factores de riesgo en pacientes cardiovasculares, por lo que es importante mantenerse informado sobre la situación pero dosificando el acceso a los medios para preservar nuestra salud mental”, sugiere Hershson. “Las nuevas herramientas tecnológicas pueden ser de utilidad para conectarse con otros, manteniendo los vínculos en estos tiempos de cuarentena”.  

Diagnóstico y tratamientos

El 21 de marzo pasado se modificó la definición de caso, que ahora incluye a todos los que han viajado al exterior en los últimos 14 días y tengan fiebre y síntomas respiratorio, además de a los pacientes neumonía grave. Además, el Ministerio de Salud ya empezó a descentralizar el testeo de SARS-CoV-2 por PCR en laboratorios públicos que tienen experiencia en el diagnóstico de influenza y en algunas instituciones privadas, además del Instituto Malbrán. En cuanto a los tests rápidos de detección de anticuerpos, todavía no están disponibles en el país.

No existe todavía un tratamiento específico para el COVID-19 en ninguna parte del mundo. La Argentina es uno de los numerosos países que participará en un estudio internacional de la OMS para evaluar la seguridad y eficacia de diversas drogas que se están usando experimentalmente para pacientes con COVID-19, como la cloroquina, el remdesivir, el interferón beta y otros antivirales. 

Un estudio ya mostró que la combinación lopinavir-ritonavir no funciona en adultos con enfermedad severa, pero la combinación de estos antivirales con interferón podría ser más eficaz. En cuanto a la polémica por los antinflamatorios no esteroides, expertos señalan que no hay evidencias de que el ibuprofeno agrave los cuadros del nuevo coronavirus. 

Por Alejandra Folgarait