Piden vacunar contra la gripe y la neumonía
Por Alejandra Folgarait
En una reunión con la SAC y otras sociedades científicas, el Ministerio de Salud de la Nación (MSAL) alertó sobre la necesidad de que las personas en grupos de riesgo, entre los cuales se encuentran los pacientes cardíacos, reciban la vacuna antigripal y la vacuna antineumocóccica, que se encuentran disponibles en forma gratuita en los hospitales y vacunatorios de todo el país.
La vacuna antigripal trivalente de este año (cepas A H3N2, A H1N1 y B) está indicada para todos los mayores de 65 años y, también, para los menores de esa edad que tengan enfermedad coronaria, insuficiencia cardíaca, valvulopatías, arritmias crónicas, cardiopatías congénitas o diabetes, entre otras patologías. Para recibir la vacuna gratuitamente, es preciso que el paciente cuente con una receta médica donde figure la patología de base.
“Si bien lo ideal es vacunarse en la época pre-invernal, todavía estamos a tiempo de dar la vacuna para influenza”, subraya Ezequiel Zaidel, miembro del área de Políticas de Salud de la SAC, quien participó en la reunión con las autoridades sanitarias. “Con respecto a la vacuna antineumocóccica, se puede indicar en cualquier momento del año. El Ministerio recomienda la polisacárida 23 valente y se encuentra en evaluación una nueva vacuna conjugada 13 valente”.
Varios estudios epidemiológicos y meta-análisis muestran una alta correlación entre influenza y el infarto agudo de miocardio, la insuficiencia cardíaca y la muerte cardiovascular.
“Es importante recordar que las vacunas que disminuyen las infecciones respiratorias son estrategias de prevención cardiovascular porque, entre otras razones, los estados inflamatorios sistémicos predisponen a la ruptura de placas ateroscleróticas y desencadenan eventos cardiovasculares agudos”, explica Zaidel, quien es cardiólogo del Sanatorio Güemes. En un estudio realizado con residentes, publicado en la revista CONAREC, Zaidel y sus colegas encontraron que la mitad de los cardiólogos jóvenes no había ofrecido la vacuna antineumocóccica a pacientes que la necesitaban, básicamente porque desconocían sus indicaciones.
Ahora, la preocupación de varios médicos por el aumento de casos de influenza que requieren hospitalización fue recogida por distintos medios de comunicación.
Según el boletín epidemiológico del MSAL del 31 de agosto pasado, “las provincias de San Juan, San Luis, Chaco, Formosa, Jujuy y Neuquén presentan tasas de notificación acumuladas superiores a las observadas el año previo. Por su parte, Catamarca, Formosa, Misiones, Chaco, Jujuy, Entre Ríos y Corrientes presentan tasas que triplican la tasa acumulada de enfermedad tipo influenza del país”.
De todos modos, el 4 de septiembre pasado, la cartera de salud nacional enfatizó que, “más allá de un leve incremento en las últimas semanas, las ETI se encuentran dentro de la zona de seguridad”.
Con un total de 37.326 casos analizados hasta fines de agosto, según datos del MSAL, el 35% resultó positivo para algún virus respiratorio. El virus sincicial respiratorio, causante de la bronquiolitis, es el que predomina actualmente. En cuanto al virus de la influenza, se registra “circulación de los tipos A y B, con preeminencia de los no subtipificados y el A H3 (estacional), todos subtipos incluidos en la formulación vacunal 2015”.
Respecto de las muertes reportadas en los medios, “las direcciones de epidemiología de las distintas jurisdicciones del país no reportaron un mayor número de casos asociados a influenza que en años anteriores. Todos los casos de defunciones producidos este año son personas que presentaban factores de riesgo y no habían sido inmunizadas a pesar de tener indicación de aplicación de la vacuna antigripal”, afirman las autoridades sanitarias nacionales.
Las personas que integran los grupos de riesgo todavía están a tiempo de vacunarse contra la influenza, que, se estima, seguirá circulando hasta diciembre. La tasa de efectos adversos es baja; entre ellos, se describen reacciones en el sitio de inyección, dolor de cabeza, mialgias, sensación de malestar, sudoración, fatiga y escalofríos.
La vacuna está recomendada para todas las personas con cardiopatías. Sólo está contraindicada en personas que hayan tenido previamente una reacción anafiláctica al huevo o proteínas de pollo, kanamicina, sulfato de neomicina, formaldehido o bromuro de cetiltrimetilamonio.
El Ministerio de Salud de la Nación subrayó el rol central de los médicos cardiólogos en las tareas de inmunización, ya que son muchas veces los médicos de cabecera de los pacientes.