Efectividad de un programa de Rehabilitación Cardiovascular basado en la práctica del Yoga.
La rehabilitación cardíaca (RC) posterior a infarto agudo de miocardio (IM) es una indicación clase I, siendo un pilar importante en el tratamiento; sin embargo, esta no se lleva a cabo en la mayoría de los casos, incluso en los países de altos ingresos (25-35%). La baja adherencia, falta de disponibilidad y de indicación médica, altos costos y la necesidad de un equipo de salud multidisciplinario son algunas de las causas; por lo que es necesario buscar alternativas. El estudio Yoga-Care se realizó en India, donde el yoga es una disciplina culturalmente aceptable y de bajo costo, esta disciplina también se encuentra muy difundida en nuestro país.
La RC consta de tres componentes: reducción del estrés (psicología y medicamentos), ejercicio y cambios en el estilo de vida (abandono de tabaco, nutrición). El yoga, también aborda estos componentes mediante el control de la respiración y la meditación, estimula dieta saludable y el abandono del tabaco. El Yoga-Care constaba de cuatro sesiones; en la primera educación en el estilo de vida, en la segunda respiración y meditación, en la tercera sesiones completas de yoga y a partir de la semana 14 práctica en el domicilio.
El objetivo del YOGA CARE fue comparar la morbilidad, mortalidad y calidad de vida, con los programas de RC clásicos, posterior a un IM. Este estudio se realizó en 24 centros de India y se randomizaron 4014 pacientes dentro de los 14 días posteriores al IM que se encontraban en condiciones de llevar a cabo la RC y la práctica de yoga. Se excluyeron aquellos pacientes que practicaban yoga regularmente y aquellos con comorbilidades que disminuyera la expectativa de vida a menos de 12 meses.
No hubo diferencias en el punto final primario compuesto (tiempo hasta la ocurrencia del primer evento cardíaco e ingreso a unidad Coronaria) y sí en la calidad de vida comparado con la RC (10,7 vs 9,2 P=0,002). En el punto final secundario de retorno a las actividades cotidianas a las 12 semanas posterior al IM mostró una inserción más temprana en el grupo de Yoga; no habiendo demostrado diferencias entre los otros puntos finales secundarios: cesación tabáquica y adherencia a la medicación.
Se puede concluir que el yoga en pacientes que ha sufrido un IM es seguro, mejora la calidad de vida y acelera la inserción en las actividades cotidianas. El yoga podría constituir una alternativa válida y económica a la RC.
Estudio: Effectiveness of a Yoga-Based Cardiac Rehabilitation (yoga-care) Program: A Multi-Centre Randomised Controlled Trial of 4,014 Patients With Acute Myocardial Infarction From India
Por el Dr. Facundo Lombardi para SAC Joven