Troponina y BNP para la predicción de cardiotoxicidad en pacientes con cáncer: Meta-análisis
La disfunción ventricular izquierda y la insuficiencia cardíaca son dos de las cardiotoxicidades secundarias al tratamiento oncológico que más preocupan, por ello la cardio-oncología busca el diagnóstico precoz para su óptimo tratamiento.
Las nuevas técnicas en ecocardiografía como el strain longitudinal global pueden predecir disfunción miocárdica antes de observarse cambios en la fracción de eyección del ventrículo izquierdo (FEVI); sin embargo, puede tomar semanas en hacerse evidente. Como sabemos, el tratamiento precoz de la cardiotoxicidad relacionada con el tratamiento del cáncer (CRTC) es vital para lograr recuperación parcial o total.
Los Biomarcadores cardíacos, troponina y péptidos natriuréticos (BNP, NT-pro-BNP) han demostrado un alto valor predictivo negativo para el screening de CRTC. En varios estudios se ha demostrado que la troponina muestra elevaciones de sus niveles tan pronto como 72 hs posteriores a la quimioterapia; y su elevación prolongada predice mayor riesgo de cardiotoxicidad. Aún disponemos de información más limitada sobre el uso del BNP/NT-pro-BNP en este contexto.
En este metaanálisis se evaluó la utilización de la troponina y el BNP/NT-pro-BNP para la predicción de disfunción ventricular izquierda en pacientes con cáncer. Se incluyeron 59 estudios, con una muestra total de 5691 pacientes adultos.
El aumento de los niveles de troponina es frecuente en respuesta al tratamiento del cáncer, y puede alcanzar el 22.4%. Los mayores niveles de troponina se observaron en aquellos pacientes que recibieron tratamiento con antraciclinas y esquemas con altas dosis de quimioterapia. La radioterapia y los inhibidores de HER2, en monoterapia, no demostraron efecto sobre el aumento de sus niveles. En cuanto a aquellos pacientes que recibieron tratamiento combinado de antraciclinas e inhibidores HER2, no se observó diferencia en la elevación de troponina entre los que recibieron <240 y ≥ 240 mg/m2 de doxorrubicina o equivalentes.
La CRTC se observó en un 17% de los pacientes. La sensibilidad y especificidad de la troponina fue de 69 y 87% respectivamente. Y el valor predictivo negativo de la troponina en la predicción de disfunción ventricular izquierda (VI) fue de 93%.
Por otra parte, la troponina ultrasensible no fue superior a la troponina convencional para la predicción de disfunción ventricular izquierda (DVI).
Los valores elevados de BNP/NT-pro-BNP en pacientes con DVI comparado con aquellos con FEVI preservada sólo se presentaron en el grupo tratado con antraciclinas; y su elevación no se asoció a la disminución de la FEVI.
Es necesaria una interpretación criteriosa de los biomarcadores cardíacos en pacientes con cáncer para evitar suspensiones o modificaciones innecesarias de tratamientos oncológicos que pueden disminuir su efectividad.
El análisis del strain aumenta la sensibilidad de la ecocardiografía para la detección temprana de DVI. Además, la combinación diagnóstica de troponina y métodos de imagen permite mejorar el rédito diagnóstico para la predicción temprana de CRTC.
Por otra parte, el valor predictivo de las troponinas para detección de CRTC ha sido observado para tratamientos con antraciclinas, antraciclinas seguidas de inhibidores HER2 y varios regímenes de altas dosis de quimioterápicos.
En cuanto al valor predictivo del BNP/NT-pro-BNP, aún falta evidencia suficiente para predecir CTRC. Podría estar relacionado a las terapias asociadas a sobrecarga hídrica. Se ha observado que el 97% de los pacientes tratados con quimioterapias que requieren hidratación elevada (>4 l/día) presentan valores elevados de BNP/NT-pro-BNP. Por ello, se requieren más estudios que permitan estandarizar su determinación, prolongar el intervalo desde la administración de la terapia y determinar su valor diagnóstico en la detección de CTRC.
Las limitaciones de este metaanálisis corresponden a la variación en los regímenes de tratamientos, las cohortes de pacientes, los métodos de detección de los biomarcadores y la definición de eventos cardiovasculares en cada uno de ellos.
En conclusión, niveles aumentados de troponina y BNP/NT-pro-BNP pueden aparecer durante el tratamiento del cáncer. La elevación de troponina implica un riesgo aumentado de desarrollo de DVI. Sin embargo, se requieren más estudios sobre la rutina de medición de la troponina durante el tratamiento oncológico para identificar a los pacientes en riesgo. Particularmente aquellos que reciben altas dosis de antraciclinas y subsecuentemente un inhibidor de HER2 se encuentran en mayor riesgo de cardiotoxicidad y se beneficiarían más de la determinación de troponina. En cuanto a la utilización del BNP/NT-pro-BNP, aún la evidencia no es consistente.
Exactitud diagnóstica de la troponina en la predicción de disfunción ventricular izquierda
Disfunción del VI | No disfunción del VI | |
Test positivo | 253 | 231 |
Test negativo | 114 | 1565 |
VPP | 0.523 | 0.523 |
VPN | 0.932 | 0.932 |
Sensibilidad | 0.689 | 0.689 |
Especificidad | 0.871 | 0.871 |
VI: ventrículo izquierdo; VPP: valor predictivo positivo; VPN: valor predictivo negativo.
Dra. Natalia Zareba
Bibliografía
- Lars Michel, Raluca Mincu, et al. Troponins and brain natriuretic peptides for the prediction of cardiotoxicity in cancer patients: a meta-analysis. Eur J Heart Fail. 2020 Feb;22(2):350-361. doi: 10.1002/ejhf.1631. Epub 2019 Nov 12.