La visión del cardiólogo joven en su primer ESC Congress 2014
Dra. Celeste Carrero y Dr. Sebastián Peralta
Un breve resumen de la beca Cardiologist of Tomorrow, otorgada por la ESC a través de la Sociedad Argentina de Cardiología.
Key-Words del ESC Congress 2014: app, wifi, interdisciplinario, eLearning, mínimamente invasivo, evidencia, Young cardiologist, investigación básica, guidelines.
Barcelona te inspira… Con ese eslogan la ciudad recibió a los más de 30.000 (¡!) profesionales que asistieron al Congreso Europeo de Cardiología. Y sin duda, fue una experiencia inspiradora.
Por muchos motivos, creemos que los cardiólogos, especialmente los jóvenes, pueden obtener mucho provecho, tanto académico, como cultural de este tipo de experiencias.
Más allá del elevado nivel científico de cada una de las charlas, hay aspectos que no podían pasar desapercibidos para alguien que nunca había vivido algo similar.
Barcelona es de por sí una capital cultural, cosmopolita y diversa. El surrealismo te invade en cada calle, en las numerosas obras de arte y a través de sus preciosos paisajes. El Congreso no estuvo ajeno a esa mística surrealista que se respira en la ciudad. Llamó particularmente nuestra atención ver mujeres vistiendo un “hiyab” en charlas con anteojos 3D, un grupo de cardiólogos suizos ciclistas que unieron Suiza-España en bicicleta para llegar al Congreso, cardiólogos con turbantes caminando por los pasillos de la Fira rumbo a alguna actividad.
Situaciones atípicas para quienes veníamos “del fin del mundo”, como diría Francisco. Los stands de la industria eran dignos de EPCOT, quizás demasiado ostentosos, e incluían hasta árboles artificiales y espacios para relajarse entre actividad y actividad. Asimismo, hubo charlas con simuladores y videos tridimensionales, un diario que resumía cada detalle de la jornada, un estudio de televisión, muchos profesionales llegando al Congreso en bicicleta y en monopatines eléctricos. Y por supuesto, la tecnología invadiendo cada miocito del congreso…
Asimismo, la ciudad tampoco escapó de la mística del Congreso. Barcelona se engalanó con el logo violeta en el aeropuerto y en cada paseo turístico. La estación del Metro más cercana a la Fira veía llegar cada mañana miles y miles de profesionales que encaraban en fila india hacia el centro de exposiciones. Y que además ¡respetaban cada semáforo en el camino! También fue admirable descubrir que una ciudad con más de un millón de habitantes luce orgullosa la etiqueta de ser “cardio-protegida”, con desfibriladores de uso público en las farmacias, en las estaciones de metro (iniciativa que va de la mano del Dr. Josep Brugada) y en los principales atractivos turísticos.
Cabe destacar que los horarios se cumplían de una manera estricta, la masiva asistencia a charlas de todo tipo y tema, la diversidad y el nivel de los exponentes y la pluralidad de actividades. La asociación de cardiólogos jóvenes nos recibió cálidamente y nos alentó a continuar y hacer crecer SAC Joven. Su presencia en el congreso era muy diversa y estaban presentes en múltiples actividades. En cada franja horaria existían no menos de 20 opciones para elegir: charlas, presentaciones de trabajos, póster, charlas mano a mano, talleres, simuladores, actividades con anatomía patológica, etc.. Y encima ¡la mayoría de ellas muy interesantes! Sin embargo, uno podía elegir a cuáles asistir en persona, a cuáles con la tablet o smartphone y cuáles ver luego a través de la plataforma ESC 365.
Sin duda que hay mucho que aprender, mucho para desarrollar. Pero asistir al congreso, más allá de recordarnos que no vivimos en Europa, puede ser una experiencia inspiradora, que revele que los cardiólogos jóvenes podemos generar grandes progresos en nuestro país, que la tecnología aplicada de la manera correcta puede achicar la brecha y que el presupuesto debe ser gastado de manera apropiada para atacar los principales problemas de salud de la población. Y en este aspecto, la salud cardiovascular debe ser una prioridad para todos.