Semana de Lucha contra la Muerte Súbita
El Consejo de Electrofisiología de la Sociedad Argentina de Cardiología se suma a la iniciativa de la Fundación Cardiológica Argentina de informar y concientizar a toda la población sobre la importancia de la lucha contra la muerte súbita.
Es por esto que «La Semana de la Lucha contra la Muerte Súbita», ha sido declarada de Interés Nacional por parte de Presidencia de la Nación.
Definimos a la muerte súbita (MS) como: muerte natural, de causa cardiovascular, que se produce en forma inesperada, con un corto intervalo desde el inicio de los síntomas desencadenantes, habitualmente menor de una hora o que acontece durante el sueño.
Representa la mitad de las muertes cardiovasculares y el 25% del total de las muertes en adultos. Aproximadamente un 50% ocurre en personas sin enfermedad cardíaca conocida, siendo ésta su primera expresión y si bien su incidencia en la población general es baja, se incrementa a medida que se seleccionan poblaciones con mayor riesgo.
La incidencia expresada en casos por millón de habitantes/año, varía según los países evaluados. Siendo por ejemplo en Francia de 32.1, China de 41.3 o EE. UU. de 70 a 155. El grupo etario más afectado se encuentra entre los 45 y 75 años de edad y un franco predominio en la población masculina, pero con un crecimiento cada vez mayor en el sexo femenino donde actualmente representa el 35%.
En nuestro país se estima que la incidencia anual de MS es alrededor de 40.000 y que la inmensa mayoría ocurre fuera de centros asistenciales.
La etiología más frecuente en mayores de 35 años es la enfermedad coronaria y en menor medida, miocardiopatías, valvulopatías e insuficiencia cardíaca. La vía final común son las arritmias ventriculares complejas como la taquicardia ventricular y la fibrilación ventricular, a su vez generadas o desencadenadas por factores hemodinámicos, variaciones del sistema nervioso autonómico, alteraciones hidroelectrolíticas, fármacos, etc.
Es por ello que el gran desafío, no solo está en concientizar a nuestro pacientes en disminuir los factores de riesgo cardíaco, sino actuar con premura cuando esta situación se hace presente.
El tratamiento efectivo del paro cardíaco respiratorio (PCR) secundario a la TV y FV es la desfibrilación ventricular, cuanto más precozmente se realice la reanimación cardiopulmonar (RCP), mayor será la posibilidad de éxito, estimándose del 90% en el primer minuto de iniciada, y desciende 7-10% por minuto transcurrido el evento.
La detección precoz del paciente en paro, el entrenamiento de la población general en maniobras de RCP básicas y la disposición y posibilidad del uso de desfibriladores externos automáticos (DEA) en forma temprana, son eslabones básicos en la cadena de supervivencia, que mejoran de forma significativa las tasas de supervivencia.
Consideraciones finales
La situación planteada nos obliga a promover políticas que fomenten la realización de cursos de RCP básica en la población general, reglamentar la disposición y el uso de los DEA en espacios públicos e incorporar tecnologías que otorguen mayor eficiencia en la asistencia y traslado de estos pacientes críticos.
Dr. César Cáceres Monié MTSAC
Director del Consejo de Electrocardiografía, Electrofisiología, Arritmias y Marcapasos «Dr. Antonio Battro»